Los principales efectos de las ondas de choque son los siguientes:
Reducción del Dolor: El paciente nota una disminución importante del dolor. Los pulsos intensivos enviados desde el transmisor al tejido dan lugar a una potente activacion de los nociceptores, la cual afecta a las interneuronas que inhiben la transmisión de la señal del dolor.
Aumento del Metabolismo: Las ondas de choque influyen en el tejido a nivel celular. El entorno químico de las células cambia debido a los radicales libres y al fomento de la liberación de sustancias inhibidoras del dolor e inflamación.
Revascularización: La aplicación reiterada de las ondas de choque en la zona afectada logra una revascularización en la que el nuevo flujo sanguíneo que llega a la zona fomenta la cicatrización y la regeneración del tejido.
Reducción del tono Muscular: El “circulo vicioso” y la fuerte asociación patológica entre el dolor y el tono muscular aumentado se interrumpe y da paso al restablecimiento de un tono muscular normalizado.